viernes, 24 de noviembre de 2017

Quién destapó a Meade? ¿El periódico La Jornada o Luis Videgaray ?

La pregunta es: ¿Quién destapó al candidato del PRI a la presidencia, el periódico La Jornada o Luis Videgaray, secretario de Relaciones Exteriores. El hombre mencionado por ambos se refiere a José Antonio Meade Kuribreña.

Las crónicas de diferentes medios impresos de circulación nacional coinciden en señalar que Luis Videgaray lanzó una serie de adjetivos a favor de Meade, frente a decenas de embajadores, representantes de otros países.

La Jornada fue más específica en señalar que Videgaray destapó a Meade por la serie de calificativos honrando el desempeño del secretario de Hacienda.


De acuerdo al mito de que es el presidente en turno quien con su dedo señala al sucesor, con la reseña de diferentes reporteros, no concuerda entre la leyenda y lo que interpreta La Jornada.


O será que Videgaray se ha convertido en la pieza clave para adelantar el anuncio.

O será, nuevamente, un personaje sacrificado por su inclinación.

O, simplemente fue una mención para medir el ambiente hacia Meade. Incluso pudo ser un experimento para conocer la intransigencia de los militantes priistas que exigen que debe ser un militante el próximo candidato.

El título que utilizó La Jornada, en particular con la palabra “destapó” llama la atención, cuando he percibido que este diario había realizado una alianza con Miguel Ángel Osorio Chong. Esto se puede comprobar revisando este último año donde le abrió espacio a este personaje en las primeras planas.


Por lo tanto me inclino a pensar que se trata de un experimento.


Ahora bien, de comprobarse una rebeldía de este periódico con el secretario de Gobernación y si llegara este a ganar la postulación en su partido y luego la presidencia, el diario se sometería a difíciles situaciones…


Por lo tanto, hay que esperar el registro de aspirantes del PRI a la presidencia para el 3 de diciembre.

martes, 21 de noviembre de 2017

Diego Díaz Padua promueve fut bol o corrupción

Diego Díaz, como mejor se le conoce, impulsa el futbol infantil y juvenil. Es un excelente promotor de este deporte.

Luego de que se conformaran escuelas infantiles de futbol afiliadas a diferentes instituciones, aquí en Chilpancingo, Díaz organizó la de Chivas del campeonísimo Guadalajara.

Años después promueve el futbol nivel Cuarta División Profesional. Hasta donde sé estuvo algunos años y desapareció, desconozco los motivos.


Como un visionario de este deporte, en el lugar conocido como La Ciénega desarrolló un inmueble para practicar el deporte de las patadas.


Dada su fama la Federación Mexicana de Futbol A C lo nombró delegado en Guerrero.


Me entero que promueve a un equipo infantil entre los 8 y 10 de edad, lo cual es loable.


Pero algo pasa. No sé si al director técnico del equipo infantil o a Diego Díaz.


Resulta que hace unas semanas se organizó un torneo en Chilpancingo de esas categorías para representar a la capital. El escenario las canchas del Crea. El triunfador se enfrentaría, en Acapulco, a ganadores de otras regiones.


Así quedaron los tres primeros lugares: Real Chilpancingo, Cruz Azul y Chivas.


Los técnicos acordaron finalmente que fueran dos los representantes capitalinos al torneo.


¡Primera sorpresa! Llegaron al torneo en Acapulco los de Chivas.


¡Segunda extrañeza! Chivas de tres partidos a competencia queda de la siguiente manera: gana, empata (gana en penalties) y pierde.


El partido ganado es porque no hubo equipo contrario (a nadie le sucedió este evento) y clasifica, digamos a semifinales. ¡Por supuesto que hubo arreglo!

Deduzco que Diego Díaz hizo valer su condición de delegado para que Chivas entrara a un torneo en donde había sido eliminado.


Volvió a hacer lo mismo para que pasara a la siguiente ronda en el torneo acapulqueño. Ya en el terreno de juego (porque le tocó jugar contra Iguala) perdió 5 a 1. El adversario le hizo ver su realidad futbolística.


Lo deplorable es que, no sé di Diego Díaz o el entrenador del equipo infantil, está enseñando a esos niños antivalores; y lo peor, que los padres de esos menores lo están consintiendo.

viernes, 10 de noviembre de 2017

The Post, película. Otro grupo contra Trump

En junio de 1971, el New York Times, el Washington Post y los principales periódicos de EU tomaron la posición política en favor de la libertad de expresión, informando sobre los documentos del Pentágono y el encubrimiento masivo de secretos por parte del gobierno que duró cuatro décadas y cuatro presidencias estadunidenses.

En aquel momento, Katherine Graham, del Post, seguía buscando su lugar como la primera mujer editora del periódico más influyente. Ben Bradlee, director del New York Times, intentaba relanzarlo porque iba en decadencia.

Se aliaron, formaron equipo, se vieron obligados a unirse y tomar la audaz decisión de apoyar al New York Times y luchar contra el intento sin precedentes de la administración Nixon de restringir la primera enmienda, la libertad de expresión.

En política no existen las casualidades.

Y algo parecido está sucediendo con la actual administración de Donald Trump con el supuesto ocultamiento de información sobre la intervención del gobierno ruso en las últimas elecciones presidenciales de 2016.

El título de la cinta revive aquellos acontecimientos, justo en el momento donde el actual mandatario estadunidense atraviesa una crisis política frente a, casi todos, los medios de comunicación.

Trump ganó por una intensa campaña en redes sociales. Vamos con la intervención del moderno medio de comunicación que se llama celular y computadora.

Su mensaje político llegó al sector más endeble, al que mejor se le puede manipular. A los jóvenes.
En su momento un estudio de contenido del mensaje político de Trump (en campaña), reveló que era meticulosamente redactado para que lo entendiera ese sector.

Trump tiene en contra a la mayoría de los migrantes; a importantes políticos del partido Republicano, quien lo postuló y le ayudó a llegar al poder; por supuesto a sus adversarios en el partido Demócrata; dividió a su círculo rojo al haber despedido a algunos de sus colaboradores de campaña y luego en la administración; con los dueños de la NFL; con empresarios ligados al TLC; las encuestas revelan que tiene una popularidad a su favor del 37 por ciento. En las últimas elecciones (celebradas el fin de semana) el partido Republicano perdió condados en donde había arrasado con Trump.

Ahora se exhibe la cinta para medir fuerza política frente a las redes sociales. Y por supuesto dañar más la imagen de Trump.

Hollywood, se puede pensar, sino todo una parte, también está contra Trump.

Por último, actúan Meryl Streep y Tom Hanks y son dirigidos por Steven Spielberg. Los tres ganadores de un óscar.