viernes, 14 de julio de 2017

Alianza MC PRD

Hace unos días los dirigentes del PRD y de Movimiento Ciudadano de Guerrero comenzaron pláticas con la intención de llegar a una alianza, única posibilidad que les da la mejor oportunidad de ganar espacios políticos.

Por parte de Movimiento Ciudadano estuvo Luis Walton Aburto y por el PRD Celestino Cesáreo Guzmán, ambos líderes supremos de cada partido.
En realidad no son nuevas este tipo de alianzas con estos partidos y saben que les ha dado excelente dividendos políticos.

La mejor historia ha sido Acapulco donde han gobernado. La distinción es que Movimiento Ciudadano, con Luis Walton Aburto, se demostró que se puede gobernar sin necesidad de recurrir a la corrupción.

Siendo Walton presidente municipal se probó que se puede gobernar con respeto a las diferencias. Los regidores de todos los partidos siempre reconocieron en Walton humildad y  tolerancia a la pluralidad.

Hasta el gobierno federal, a través de la Auditoría Superior de la Federación hicieron un reconocimiento público a la honestidad y transparencia en el ejercicio de Walton.

Muchos se han de preguntar si Walton ostentó  recato en otra manera de gobernar en el municipio más importante de Guerrero ¿por qué no lo apoyaron los perredistas para la gubernatura en 2015?

La respuesta es sencilla. Ambiciones de las corrientes perredistas. Sintieron que podían continuar en el poder; perdieron. Pero con la cantidad de votos que obtuvo Movimiento Ciudadano podría el PRD haberle dado la pelea al PRI.

En esta alianza PRD MC asoma la posibilidad de que los negro amarillo reflexionen y apoyen a MC; en concreto que vaya Ricardo Mejía Berdeja como candidato de los partidos y pueda MC seguir demostrando que son políticos honestos con capacidad suficiente para respetar la pluralidad.


Movimiento Ciudadano es la tercera fuerza política en el Estado y en su mayoría los militantes de color naranja son honorables, cualidad escasa en la clase política.

jueves, 13 de julio de 2017

AMLO 20 millones de votos

El único candidato seguro a la presidencia para el 2018 se llama Andrés Manuel López Obrador. Su partido se conoce bajo las siglas de Morena. Los demás, de cualquier otro partido o sin partido son aspirantes o suspirantes.

López Obrador es muy conocido. No lo es en todo el país; por ejemplo en lo que se conoce como la región norte no le favorece. El centro y la parte sur, sí que es muy estimado.

He dividido el territorio en tercios. Y con dos a favor de AMLO desea conquistar 20 millones de votos. Un objetivo cuesta arriba, pero que es real la pretensión.

Harto difícil porque cuando participó en la primera ocasión en 2006 López Obrador obtuvo, en números redondos, 15 millones de sufragios.

En la segunda oportunidad en 2012 elevó su votación a 16. Efectivamente levantó un millón más, pero llegar a 20, se antoja complicado, que no imposible.

El mismo AMLO se puso ese tope porque en el último proceso electoral, donde contendió contra Enrique Peña Nieto, actual presidente, éste ganó con 19 millones de votos.

La diferencia entre el primero y segundo lugar fue de 3 millones de sufragios.

Es decir, que si le hacemos caso a la tendencia histórica de AMLO resulta que obtendría en el siguiente proceso un millón y medio de votos a su favor. Si lo sumo me da un gran total de 17 millones y medio. En el mejor de los casos serían 18. Llegar a 20 en 2018 sería casi un milagro. También les recuerdo que en política los milagros existen.

Escribo la palabra tendencia porque en anterior candidato del PRI que ganó la presidencia, me refiero a Ernesto Zedillo Ponce de León, lo hizo con 17 millones de votos.

Dos factores favorecen a AMLO. La proliferación de las redes sociales, donde la gente se expresa y puede ser alimento para fomentar el descontento contra los mismos actores políticos a lo que él llama “la mafia”. Y la división que se observa entre los empresarios.


Sin embargo, esos a los que AMLO ha calificado de mafia, ahora algunos de ellos son sus aliados.  Y los empresarios “sus amigos” buscan privilegios. Categoría que AMLO detesta, pero que en política, en este caso para ganar, los necesita. Contrastante, sí, pero así es la política.

miércoles, 12 de julio de 2017

PRI ¿cambia o lo cambian?

La sentencia se encuentra elaborada desde hace muchas décadas.

Diría…por lo menos medio siglo. Cuando llegó al poder Luis Echeverría Álvarez a la presidencia; se distanció de empresarios y cobijó a universitarios.

Sí, a los delatores del movimiento estudiantil del 68 y con esto dio inicio a los tecnócratas. Alimentó a la izquierda.

El presidencialismo de entonces tuvo su primera gran crisis política, recuérdese que se comentó hasta de un golpe de Estado.

Con Echeverría se vivió la primera crisis económica. El peso sufrió una devaluación ante el dólar.

Desde mi perspectiva el cambio que enfrentó el PRI fue con los empresarios, con grupos reales de poder.

Muchos de ellos, para hacer contrapeso político e intentar arrebatarle el poder político al partido oficial se afiliaron al PAN.

Este partido vivió una diferencia trascendental o era independiente del gobierno (sin prerrogativas) o formaba parte del sistema político. No hubo acuerdo y para evitar una fractura mayor decidieron dejar de participar para las siguientes elecciones.

José López Portillo como candidato único del PRI evidenció ausencia de democracia en México. Con él asomó la frivolidad y demasiados errores.

Llegó al poder ejecutivo el primer tecnócrata con Miguel De la Madrid. Se alejaron de la política para aplicar administración en un país desorganizado.

Chantajearon a la sociedad con la muerte de Colosio y consiguieron 17 millones de votos con Ernesto Zedillo Ponce de León.

Algunos empresarios comenzaron a reunirse en el PAN. Otros priistas dividieron a su partido.

Esta brevísima historia es para observar que el PRI podría cambiar por sus propios militantes y con la separación o presión de empresarios.

No veo por ningún lado que sea la sociedad.


En estos momentos se organiza dentro del PRI una corriente generacional que exige tomar en cuenta en la toma de decisiones (espacios administrativos y/o políticos) a las bases. Algunos empresarios están apoyando a AMLO y al PAN.

jueves, 6 de julio de 2017

Académicos en política

En política existen códigos no escritos. Procedimientos que se cumplen y que están obligados a obedecer  por usos y costumbres. Quien llegue a romper o violar “estas tradiciones” tendrá un castigo a su debido tiempo.

Cito algunas prácticas del sistema político mexicano.

Los políticos inteligentes no deben asumir el poder.

La lista existe y va numerada.

Para ofrecer gobernabilidad quien sea el próximo presidente no debe ser del equipo cercano de quien deja el poder.

El primer párrafo, en las prácticas, requiere de otra explicación. La diferencia, entre los académicos, son los conceptos listo e inteligente.

Un personaje listo, abusado presenta la característica de ser audaz. Atrevido. Aprende rápido, pero carece de la habilidad para crear ideas propias. Por lo general imita.

El inteligente, piensa y formula hipótesis y crea sus historias con un alto grado de verosimilitud. Sabe de teorías de acuerdo a su campo profesional.

En el terreno político llega al poder una persona que sea valiente, pero leal. Listo, sí; pero no inteligente porque éste podría dar cambios que dañen al antecesor.

El ascenso político es gradual. Llega el espacio de toma de decisiones en el tiempo preciso, ni antes ni después. Cuando sucede que alguien progresa súbitamente, de igual manera desciende. A estos acontecimientos los han acuñado con la frase: sube en elevador y baja por el mismo aparato.

Cuando apelo al ascenso gradual es porque los que aspiran a un puesto político han hecho la petición y hacen su trabajo político. Es decir, se han formado y difícilmente dan paso a quien viene detrás. Cuando alguien brinca el numeral es porque se formó un ambiente fuera de la común, extraordinario y logra o mayoría o consenso.

En la circunstancia anterior se puede decir que llegan los académicos al poder. El caso Michoacán y Guerrero son ejemplo de ello. Ambos fueron funcionarios universitarios. Michoacán Salvador Jara, rector de la universidad Nicolaíta y Rogelio Ortega, secretario general de la UAGro. Los escenarios para arribar a la gubernatura fueron similares. Entraron como bomberos ante una crisis política.

En la tercera leyenda que escribí en este texto me refiero a que en el PRI el nuevo presidente de la República no pertenecía al grupo que dejaba el poder. Esto le dio estabilidad política al país y los grupos de poder estaban tranquilos porque sabían que sus privilegios permanecerían.

En la pretensión de ser presidentes para el 2018 ya asoman dos académicos, bueno, por lo menos, fueron rectores de la UNAM. José Narro, actual secretario de Salud y Juan Ramón de la Fuente, quien es revivido (políticamente) por el PRD.


De los dos anteriores quien presenta el perfil de académico es Juan Ramón de la Fuente. Es inteligente.

miércoles, 5 de julio de 2017

José Luis Cuevas

El dibujante y escultor José Luis Cuevas, literalmente, vivió y murió en la polémica.

No fue pintor, aunque siempre se auto adjudicó ese calificativo. Fue un personaje excéntrico tanto por lo que decía y por lo que escribía. Lo único por lo que fue inconfundible fue por su exagerado egocentrismo. Todo giraba, según él, a su alrededor.

Fiel a su tormento hasta en su muerte causó altercado familiar. Ahora si que genio y figura hasta la sepultura.

No sé si fue dicha u obra de la casualidad, pero fui vecino de José Luis Cuevas. Nos separaba una calle. Unos 300 metros de distancia. Y esto no quiere decir que sea o haya sido igual o un poquito menos famoso que Cuevas. O que por la cercanía haya ganado cierto perfil artístico,  menos científico. Simplemente lo tengo presente cuando caminaba por las calles empedradas de San Angel.
Le gustaba vestir botas o chamarras de piel.  A un lado, con cadena, un perro de raza pastor alemán.

Cuevas tuvo la osadía de criticar a los muralistas mexicanos. La máxima expresión de la cultura en los últimos 100 años. Y este perfil lo llevó a la popularidad.

Aprovechó esa notoriedad para escribir en uno de los mejores periódicos de circulación nacional: El Universal, cuando era director Julios Scherer García. Un periodista que dio inicio a la pluralidad.

Todo lo que decía o escribía Cuevas presenta el rasgo de egocentricidad acendrado.

Cuando era invitado a un evento, siempre creía y decía que por él que se congregaba la gente. Así era Cuevas.

En estos días televisa difundió un video en donde el mismo Cuevas relata cómo inició su fama pública. En entrevista comentó que en una de sus exposiciones Pablo Picasso compró dos dibujos y que con esta peculiaridad dio inicio a su aura. 

Creo que aprovechó el evento para colgarse y decirse que era lo mejor del área de las artes plásticas en México.


La mayoría de los artistas coincidían que no era pintor y sí un extravagante dibujante. Esta fue la tónica de su vida y hasta frente a su ferétro: la polémica.

martes, 4 de julio de 2017

Partido verde, ni tanto

El partido verde ecologista mexicano es, como otros partidos políticos, una franquicia familiar. Los dueños son los González Torres.

Jorge el papá y Emilio el hijo. En el abanico de ideologías ya no entraban. Las tres opciones ya estaban ocupadas: izquierda (PRD), centro (PRI) y derecha (PAN). 

Tuvieron el tino de crear la corriente ecologista mexicana de moda en Europa.

En escasas ocasiones han presentado iniciativas acorde con lo que postulan que deberían ser temas relacionados con la ecología o el medio ambiente. De esas ninguna ha sido trascendental para el país.

El crecimiento del partido verde fue por el tino que tuvieron al formar una alianza política con el partido en el poder. Con esto consiguieron y conservaron el registro para allegarse de recursos, mismos que han aprendido a distribuir entre simpatizantes y militantes.

La alianza con el PRI le dio extraordinarios frutos, los cuales se traducen en regidurías, presidencias municipales, diputaciones locales y federales, además senadurías.

En este sexenio los incorporaron el gabinete en subsecretarías.

Por su pragmatismo político han aprendido a hacer política. Dicen ser leales al PRI y eso habría que reconocérselos, por algo lo patentizan.

Los verdes hacen lo que priistas les indican. Esto consta en el siguiente relato: En las elecciones estatales de Guerrero (2015) el único municipio donde no concretizaron la alianza política fue en Acapulco. Aparentemente no había una explicación para evitar la alianza. Hasta que gana el PRD con Evodio Velázquez.

Lo anterior se traduce en la presunción de que hubo un arreglo político. La gubernatura para el PRI y Acapulco para el PRD y con ello posibilitar la gobernabilidad. Es decir, no podían dejar huérfanos a los perredistas luego de retener el poder por 10 años.

Por su experiencia los ecologistas han aprendido a dialogar con quien creen les pueda ayudar o a ganar o a conservar privilegios. Y en esto se encuentran algunos diputados y senadores del verde con la  idea de juntarse en un probable gran frente. Es decir, algunos “no tan verdes” se están saliendo del carril.


Si el verde llegara a dividirse, evidentemente que, debilita al PRI, su eterno aliado y benefactor. Asoma la preocupación en este partido, porque es lo que le ha dado triunfos: su unidad.

lunes, 3 de julio de 2017

Zepeda, Juan y su idea de coalición

Quién se puede olvidar de Juan Zepeda? Estoy convencido que en el ámbito político es conocido. Dudo que en otros sectores se le recuerde como él y su equipo lo considera.

Juan Zepeda fue candidato a gobernador para el Estado de México por el partido de la Revolución Democrática. No ganó, pero se hizo famoso; bueno ellos están seducidos con la idea de haber llevado a su partido del cuarto al tercer lugar, les da para postularse como candidato a la presidencia para 2018.

Remarco, no ganó la gubernatura pero venció al PAN de Ricardo Anaya  y de Josefina Vázquez Mota.

Según sus cuentas, con el PRD partió, de acuerdo a las encuestas, con un 3 por ciento de las preferencias y logró llegar a un 18 por ciento.

Con ese porcentaje inició su precampaña con un recorrido en todo el país e intentar darse a conocer en todo el país y abrir la posibilidad de ser el candidato a la presidencia por el PRD.

Pretende que la sociedad civil nacional haga presión en los grupos internos de ese partido para que lo consideren. Campaña interesante, pero creo que no le servirá porque el PRD ya ha esbozado que son la corrientes, las mejor organizadas, las que deciden las candidaturas.

Pero Zepeda, supongo, está inspirado con su triunfo en el Estado de México.

Una cualidad de Juan Zepeda es su valentía, su arrojo. No sé si este valor le alcance para su propósito. Lo que habría que rescatar su coraje.

De las propuestas que trae en su discurso es la formación de una coalición. A partir del diseño de un proyecto de nación. Piensa que primero debe discutirse el plan y después acordar el candidato. La otra iniciativa que plantea es que todos los partidos deben dialogar para llegar a un ideal de país, en donde deben respetarse los acuerdos y las sanciones.

Precisó que no debe dejarse fuera de esta coalición a los priistas. Esto indica, una nueva cultura política, que algunos dirigentes de partido todavía no alcanzan a entender de qué se trata, porque, interpreto, están el estadio de la alianza, la cual se establece para llegar al poder.

Dice Zepeda, en lo cual coincido, una coalición, con el cumplimiento de compromisos y castigo a prohibiciones es como se consigue credibilidad y gobernabilidad.

Ahí está la propuesta de Zepeda.


En lo personal no sé si, incluso, la clase política mexicana, se encuentre a la altura de esa aspiración de coalición que propone Juan Zepeda.