miércoles, 27 de noviembre de 2013

Políticos asesinos y asesinatos políticos

El periódico Pueblo, en la ciudad de Chilpancingo, Guerrero, publicó el reporte de Zacarías Cervantes: la Red Solidaria Década contra la Impunidad, hizo público el testimonio por escrito de Nicolás Mendoza Villa, activista de Unidad Popular (UP), el cual ha sido certificado por notario público, en el que presuntamente implica al alcalde de Iguala, José Luis Abarca Velázquez, del levantón que sufrieron ocho integrantes de esa organización política en mayo y la posterior ejecución de tres de ellos.

Un acontecimiento hasta cierto punto normal en la disputa por el poder. Sin embargo,  alternativa desterrada cuando las elecciones son el método para dirimir las diferencias.

El contexto actual habría que reconocerlo es de inestabilidad. La inseguridad es lo más palpable y no se sabe quién puede ser un real enemigo. El ambiente está crispado.

Lo que ayer se conoció  a través de las páginas de Pueblo me remite a 1913 (inicio de la revuelta por el poder) cuando asesinaron a Francisco I. Madero a manos de Victoriano Huerta, éste deja la presidencia por presión de Venustiano Carranza y Francisco Villa. Al usurpador, así se le califica, sucumbió ante el alcohol.

Eulalio Gutiérrez es nombrado presidente en sustitución de Huerta pero Venustiano Carranza lo desconoce. Al redactarse la nueva Constitución Carranza también es el nuevo presidente y es asesinado posteriormente por el grupo de Adolfo de la Huerta, quien a su vez sucumbe ante los sonorenses comandados por Álvaro Obregón.

Obregón es asesinado por Plutarco Elías Calles.
Otro asesinato fue el de Francisco Serrano, relato hecho novela por Martín Luis Guzmán con el título El Caudillo. Serrano se enfrentó a la dupla Obregón-Calles.

Es en ese sentido que digo que es normal esa herramienta del asesinato. No se justifica. No. Pero… está presente en la política.

Otro asesinatos más recientes de políticos son los de Luis Donaldo Colosio y José Francisco Ruiz Massieu.  Quien fuera Gobernador de Guerrero, Ruiz Massieu, declaró en la prensa nacional que “los fordcitos” ya no utilizan viejas prácticas, referente al uso de la violencia. Algunos años después lo expiran.

No se sabe quiénes o quién fueron los autores intelectuales de estos dos últimos sucesos. En esos años no se percibía inestabilidad ni tampoco inseguridad; sin embargo, los desaparecieron. Es decir, rencillas de la clase política.


En el caso de Abarca Velázquez habrá qué esperar las reacciones de sus grupos de apoyo y la presión de sus adversarios. Con un agregado: ya no se habla de política local, sino internacional. Golpe dado ni Dios lo quita.

miércoles, 20 de noviembre de 2013

Alianza Astudillo-Añorve

En política los débiles se deben juntar para dar pelea.

Tulio Samuel Pérez Calvo uno de los hombres más cercanos a Héctor Astudillo Flores en su Facebook nos informa que está trabajando con el equipo de Manuel Añorve Baños.

En política el triunfo no es eterno como tampoco la astenia.

Astudillo Flores es el personaje con mayor peso político en la capital del Estado. Ha sido en dos ocasiones presidente municipal de Chilpancingo y diputado local.

También ya fue candidato a la gubernatura; perdió ante Zeferino Torreblanca Galindo.

Su debilidad, en este momento se debe a que, como grupo, no les dieron ninguna posición en las delegaciones federales. Un resquicio para conservar ciertos privilegios o, al menos un respiro como conjunto.

Manuel Añorve Baños luego de perder personalmente y como organización la presidencia municipal de Acapulco y luego la gubernatura (ante Ángel Aguirre Rivero), pudo rescatar una diputación local para su esposa y una delegación federal para quien fuera su tesorero en el puerto.

Se cobijó a la sombra de Manlio Fabio Beltrones, quien lo hizo diputado federal y en este momento ostenta la secretaría de la comisión de vigilancia de la Auditoría Superior de la Federación.

Añorve, en estos momentos, mantiene baja estima en Acapulco. Cada que se presenta en actos públicos el respetable lo abuchea.

Ambos tienen un adversario común: los Figueroa, sino la familia, por lo menos Smutny (Figueroa III). Coinciden en ser candidato a gobernador.

Figueroa logró quitar de la coordinación de diputados locales a Astudillo en un ambiente de dimes y diretes. Figueroa dijo que Añorve tenía vínculos con grupos delincuenciales.

Tulio Pérez Calvo fue tesorero en el último periodo municipal de Héctor Astudillo, incluso lo hizo presidente municipal interino.

El que se encuentre laborando con Añorve en la cámara de diputados es sólo una muestra de alianza para lo que viene: la candidatura a gobernador.


Juntos esperan hacer la roncha, como se dice popularmente.

martes, 19 de noviembre de 2013

Reelección PRD y de Nueva Izquierda

El actual presidente nacional del PRD, Jesús Zambrano Grijalva, propone que en la próxima asamblea nacional se debata la reelección en la presidencia de este partido.

De entrada se descalifica  en la reelección porque podría calificarse de inequitativo, pues  como dirigente lleva ventaja al manejar recursos, además la misma posición del puesto le da promoción.

La iniciativa le apuesta a dos objetivos: retener la presidencia nacional con su grupo –Nueva Izquierda-, medir fuerza con los otros grupos (aún unidos contra ellos).

Su propuesta para continuar (como los Chuchos) al frente del PRD nacional es Carlos Navarrete, personaje que amarró a la organización más fuerte en Guerrero, conocido como Grupo Guerrero de David Jiménez Rumbo.

La fuerza política perredista se localiza en dos entidades: Distrito Federal y Guerrero. Y en ambos lugares gobiernan personas que no son propiamente hechura de ese partido. Pero que han establecido alianzas con Nueva Izquierda.

Con la reelección despiertan la ambición de otras corrientes con la intención de dispersarlos, en caso de que salga Cárdenas como precandidato, y al mismo tiempo plantea la opción, con mayores probabilidades (si llegara a aprobarse la reelección) de proponer a otra persona de Nueva Izquierda como Leonel Godoy, Jesús Martínez o Guadalupe Acosta.

El dudoso desempeño como gobernadora de Zacatecas de Amalia García le restaría popularidad; y ya ni quien se acuerde de Pablo Gómez; los que no tendrían ninguna oportunidad serían Rosario Robles ni Andrés Manuel López Obrador porque ya no pertenecen a este partido.


Nueva Izquierda hace política para conservar la conducción de su partido. Y, aunque no lo crean, con enormes posibilidades de llegar a la presidencia del ¡país!

lunes, 11 de noviembre de 2013

Affaire periodista ex gobernador

Dicen que el encuentro llegó a los golpes.  Según Twitter  y el periódico El Sol de Chilpancingo.

El escenario un restaurante en sur del Distrito Federal.

Los pugilistas: Oscar Mario Beteta quien es conocido por un programa radial y televisivo de la cadena Fórmula.

El contrincante Zeferino Torreblanca Galindo, ex gobernador de Guerrero.

Existen dos versiones.

a) Que el agresor fue Zeferino, quien se acercó a la mesa del periodista y lo agredió.

b) El golpeado fue Zeferino bajo la misma descripción.

El periodista dice que existen muchos testigos de cómo se dieron los acontecimientos.

El ex gobernador, según, ya entabló una demanda por lesiones.

Fue real el pugilato.

Luego no vayan a salir con que fue una leyenda urbana.

Esto en referencia a otro affaire entre el ex gobernador, Zeferino Torreblanca Galindo y el ex candidato a gobernador por el PRI, Manuel Añorve Baños en otro restaurante en el puerto de Acapulco.

Hubo muchos testigos del acontecimiento.

Años después, en una especie de reconciliación política, coincidieron en señalar que los "añarazos" fue un mito, un invento de la prensa.

Zeferino, para quien escribe, se encuentra en una posición de debilidad política.

Los periodistas, dada nuestra susceptibilidad “profesional” se nos da (sí sé porque) la inclinación al morbo.


Seguiremos leyendo a Beteta en El Universal y escucharemos , si le dan cabida, las declaraciones de Zeferino. Van a salir “cositas” de cómo es la relación prensa poder. Bueno, eso espero.

domingo, 10 de noviembre de 2013

Los Chuchos (PRD) en Guerrero se fortalecen

Se le conoce a esta corriente de opinión como los Chuchos porque llegaron a la presidencia nacional del Partido de la Revolución Democrática con Jesús Ortega Martínez y le siguió Jesús Zambrano. Su organización se hace llamar Nueva Izquierda.

Muchos perredistas consideran a los chuchos de dudoso pensamiento de “izquierda”.  Ortega Martínez se ha caracterizado por ser un personaje pragmático de la política; negociador hábil como lo fue su mentor Rafael Aguilar Talamantes, fundador del Partido Socialista de los Trabajadores, quien se convirtió en comparsa del PRI.

Jesús Zambrano participó en la política como guerrillero en la liga 23 de septiembre. Fue preso y luego amnistiado en donde aprendió a “mercadear” con la política.

Si se toma la definición de política como el arte del diálogo y el acuerdo para evitar conflictos, los Chuchos están encapsulados.

Una muestra de ello es la firma del Pacto por México que patentiza Jesús Zambrano y que ha dividido a los perredistas.

La propuesta de los Chuchos para conservar la dirigencia nacional  por tercera ocasión es Carlos Navarrete, ex senador. Y al igual que los Chuchos lleva el sello de la casa, negociador.

En Guerrero, uno de los bastiones del perredismo, Navarrete se consolida como próximo presidente nacional, pues el Grupo Guerrero, uno de los grupos con mayor peso político, ha decidido apoyarlo.

Su grupo local, Nueva Izquierda, la tercera fuerza perredista, por supuesto que ha anunciado también darle su respaldo.

La organización perredista que ocupa el segundo sitio es Unidad de Izquierda Guerrerense que encabeza Víctor Aguirre Alcaide, todavía no ha decidido.

Y como en política los primeros en adhesión le corresponde los mejores espacios. En caso de triunfar, nuevamente, los Chuchos les irá mejor a Grupo Guerrero y a Nueva Izquierda en Guerrero.


Así Carlos Navarrete se convertirá en el árbitro necesario para dirimir las diferencias entre Grupo Guerrero, Unidad de Izquierda Guerrerense y el mismísimo gobernador.

jueves, 7 de noviembre de 2013

Recuerdo político jurídico juarista en Guerrero

El gran Benito Juárez y su dicho justiciero.

A los amigos, justicia y gracia; a los enemigos, la ley a secas. Es decir, política.

Así se aplica la ley en Guerrero. Se detuvo y encarceló a líder de policía comunitaria, Gonzalo Molina. Organización adversa al gobierno estatal. No pasa lo mismo con Bruno Plácido otro dirigente indígena de la Unión de Pueblos y Organizaciones de Guerrero (UPOEG), porque es aliado del gobernador.

Se les retiene salario a maestros de la CETEG, contrarios al gobierno estatal. Se apoya al SNTE, partidario del gobierno estatal. Ni una ni la otra proponen métodos para superar el rezago educativo. Ambos son responsable o culpables, como se le quiera ver.

A los damnificados que protesten en las calles les van a dar cárcel; a quien defraudó el Instituto Estatal Electoral, ahora ex Contralor, Javier López García, perdón.

miércoles, 6 de noviembre de 2013

PRD a la presidencia

La política, sostiene una de sus leyes, es cíclica. Se repite.

En México los políticos pragmáticos la han definido como la rueda de la fortuna. Y la simplifican aún más: a veces estás arriba y en otras abajo.

En este ambiente de pleonasmo político el PRD hace lo que hizo el PAN.

Dos grandes acontecimientos nos ofrecieron los panistas. a) exhibir a nivel internacional  el autoritarismo de un partido en 1982 y b) y que es posible la alternancia en la conducción del país en 2000.

Dos líneas se rescatan en esos eventos. Una discusión que casi lleva a una división en el primer momento y, en el segundo, un acercamiento con el grupo en el poder.

La izquierda sufrió un desgarramiento por su participación en eventos electorales; luego llegó a una gran unidad con la conformación del PRD y con ello la reforma política de 1977, éste fue su primer momento.

En la segunda circunstancia un grupo de perredistas se han acercado a negociar con el grupo en el poder. Incluso apoyan sus propuestas.

Situaciones similares entre los identificados como derecha y ahora los denominados izquierda.

Con esos arreglos los panistas llegaron a la presidencia. Y es el objetivo de algunos perredistas, porque perciben la reiteración de sucesos políticos.

Con la alternancia y el PAN en la silla presidencial avanzó la democracia. Si el PRD consiguiera ese puesto la democracia mexicana se consolida.


Sólo apunto que sería una democracia electoral, de participación social, pero no de solución a los problemas sociales y económicos de una nación.