martes, 28 de octubre de 2014

Consenso o mayoría política, Beatriz Mojica Morga

En una situación tan complicada y difícil como la que atraviesa Guerrero la única y mejor salida, luego de la licencia del gobernador, Ángel Aguirre Rivero, era encontrar un personaje de consenso. Lo fue Rogelio Ortega Martínez.

No era suficiente un ambiente de mayoría-bajo el concepto de 50 más uno- porque entonces casi la otra mitad iba mostrarse inconforme y la situación política, de por sí enconada, jamás iría a descender.

El alto riesgo de salir divididos en el escenario de mayoría era signo de mayor dificultad y ello desataría más furia.

Lo que requería el nuevo gobernador era consenso de las principales fuerzas políticas y electorales. En política ese era la dificultad: alguien que lograra coincidencias.

Así, debería de entender la situación Beatriz Mojica Morga. En política el resentimiento orilla a la desesperación y ella puede presentar otros yerros.

Mojica Morga tendría que entender que la política no implica necesariamente ganar. Sino saber que también se pierde ganando.

Otra idea de la política es presentar habilidad para conservar el poder y pensar fríamente que el ambiente cambia; lo que ahorita es perjudicial al rato se transforma en benéfico o viceversa.

Si Mojica Morga se obnubila y se empecina en ser candidata con el argumento de que las mujeres son más de la mitad de la población y más de la porción del 50 por ciento del padrón electoral, lo único que provocará es una división interna en su partido para que pierdan las elecciones de 2015.

O tal vez esa sea deliberadamente su posición política para que triunfe el otro partido, en este caso, el PRI. Y con ello lograr que ella conserve cierto poder, pero ya no con su partido, porque así es la política.


De ser cierta esta última posición, legítima en política, Mojica Morga, no podría después presumir de congruencia política y de que las mujeres son diferentes frente a los hombres en el quehacer político.

lunes, 27 de octubre de 2014

Académicos en política: Rogelio Ortega

En México las diferencias entre académicos o técnicos, conocidos con el término politológico tecnócratas, contra políticos comenzó en el sexenio de Luis Echeverría Álvarez.

El objetivo de los tecnócratas es aplicar un método científico para la solución de problemas sociales.

El primero en proponer la dirección técnica sobre la política para encontrar soluciones de la nueva sociedad, basada en la revolución industrial, fue Auguste Comte a mediados del siglo XIX. En el Mundo cobra fuerza la nueva idea en la década de los 30 y en México da sus primeros pasos en 1970.

El surgimiento de la guerrilla, así como la organización de cientos de sindicatos independientes orilló al gobierno federal a realizar incipientes reformas políticas para darle oportunidad a partidos a ser representados en el Congreso. Al mismo tiempo Echeverría cuestionó muy fuerte el papel de la iniciativa privada que había privilegiado en su beneficio el crecimiento económico en detrimento de la justicia social.

La política pública de este sexenio se basó en lo que hoy conocemos como populista; es decir, programas de apoyo a grupos vulnerables, lo cual provocó la idea de que el gobierno está obligado a mantener a su comunidad.

Bajo el distanciamiento de gobierno y empresarios fueron reemplazados éstos últimos con técnicos; es decir, una aparente reconciliación entre universitarios y gobierno, luego de los sucesos del 68.

En los sexenios posteriores  estos técnicos, luego conocidos como tecnócratas, comenzaron a organizarse para disputar el poder a los políticos.

El primer tecnócrata en asumir la presidencia fue Miguel de la Madrid, luego de haberse cuestionado el presidencialismo mexicano a nivel internacional en la persona de José López Portillo. JLP llegó a dirigir al país sin ninguna oposición ni ficticia ni real.

El principal autor de la demostración de un sistema de partido único fue el PAN (partido real de oposición al PRI), porque en 1976 no presentó candidato a la presidencia.

Esto jamás fue premeditado por los panistas, sino que en estas elecciones tuvieron un enfrentamiento interno brusco que, para evitar la división, prefirieron dejar de participar por la presidencia.

La continuidad de los tecnócratas en el poder se dio con Carlos Salinas de Gortari. Estos tecnócratas no eran unos sencillos y simples técnicos, sino que son personas que presentan títulos de maestría y doctorado en universidades del extranjero. Con otra visión.

Se parte del razonamiento de que los académicos, a través de sus estudios, se encuentran cercanos a una realidad y han ganado sensibilidad frente a la sociedad.

Los académicos tienen conocimiento y un método; mientras que los  políticos presentan percepciones de la realidad por su acercamiento cotidiano con la gente.
Los políticos ya tuvieron su oportunidad, es tiempo de que prueben los académicos.


En este momento de crisis política ya se encuentran dos gobernadores con la intención de sacar adelante esa situación. Michoacán con Salvador Jara Guerrero y Rogelio Salvador Ortega Martínez en Guerrero, ambos de formación académica; de lograrlo, estaríamos en una nueva etapa: ahora los académicos incursionan en política.

domingo, 26 de octubre de 2014

Caída de gobernadores, México

La licencia de Ángel Aguirre Rivero para dejar el cargo de gobernador de Guerrero lleva una revisión somera de mandatarios estatales mexicanos que han sido presionados para dejar el cargo. La base de los datos están consignados en el periódico Mileno bajo la firma de Rosa Emilia Porras Lara. Evidentemente los comentarios en cursivas son de quien suscribe el presente texto.

Guerrero presenta dos casos de licencia: Rubén Figueroa Alcocer y el reciente de Ángel Aguirre Rivero. Los otros acontecimientos del 60 con Raúl Caballero Aburto, fue una desaparición de poderes.

Alcocer estuvo en el cargo 3 años de 1993 a 1996. Rubén Figueroa pidió licencia definitiva ante el Congreso del Estado el 12 de marzo de 1996, luego de ser señalado por organizaciones sociales como responsable del asesinato de 17 integrantes de la Organización Campesina de la Sierra del Sur (OCSS) el 28 de junio del año anterior, en la llamada masacre de Aguas Blancas. Lo sustituyó en el cargo Ángel Aguirre Rivero.

La licencia fue pedida por el presidente de la República, Ernesto Zedillo Ponce de León, ya que Figueroa es íntimo amigo de la familia Salinas de Gortari. En aquellos años las diferencias entre el presidente y el ex presidente eran mayúsculas, a tal grado, que se exilió Salinas en Cuba y en Dublín, Irlanda.

En Baja California, Xicoténcatl Leyva Mortera pidió licencia al cargo en 1988, a un año de concluir su mandato, por lo que describió en su licencia como "resultado de las circunstancias del momento político". Ese año Leyva reconoció el triunfo de Cuauhtémoc Cárdenas sobre Carlos Salinas de Gortari en la elección presidencial.

Carlos Salinas de Gortari escribió el libro “La década perdida” donde nos publica, entre otros temas, las actas de escrutinio donde él demuestra que ganó las elecciones de 1988. Sin embargo, el 5 de mayo de 1989, apenas a 10 meses de haberse celebrado las cuestionadas elecciones federales, se incendió el Palacio Legislativo de San Lázaro, lugar donde se encontraban las actas de escrutinio. Era la única prueba de resultados reales de la competencia electoral.

Eduardo Robledo, gobernador de Chiapas duró solo 70 días en el gobierno del estado, solicitó licencia al cargo después de la aparición del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) 1994. Lo sustituyó Julio César Ruiz Fierro.

El surgimiento de los indígenas fue una expresión de presión política frente a Salinas de Gortari ya que en este año se firmaba el Tratado de Libre Comercio con la idea de ofrecerle al mundo, que en México ya no había pobreza, que había sufrido un tremendo cambio.

La imagen de Salinas era extraordinaria ante el mundo e indicaba que él tenía el control económico y político del país. Esa representación estaba encarnada en Luis Donaldo Colosio, hechura de Salinas, quien vendría a darle continuidad al proyecto económico y político del ex presidente Salinas.

Los enemigos de Salinas no cayeron en el garlito y tuvo un término trágico con la finalidad de impedir el poder tras el trono.

En Jalisco, Guillermo Cosío Vidaurri fue gobernador de 1988 a 1992. Dejó el cargo tras las explosiones del alcantarillado en Guadalajara, que dejaron como saldo 210 muertos y más de mil heridos. Carlos Rivera Aceves fue nombrado gobernador sustituto.

En realidad la responsabilidad era de Pemex por la fuga de gasolina a consecuencia de la deficiente red de distribución de líquido. El contrato de esa instalación, con severas fallas fue firmado por un burócrata de nombre, Miguel De la Madrid Hurtado, quien a la postre sería presidente de México y padrino de Salinas de Gortari.

Además el director de Pemex es un protegido de Carlos Salinas de Gortari, cuyo nombre responde a Francisco Rojas.
Era la cabeza del gobernador para proteger a un ex presidente y a un amigo de Salinas.

Por problemas de salud, Fausto Vallejo solicitó licencia temporal al cargo de gobernador de Michoacán tres veces: la primera en abril de 2013, solo dos meses después del surgimiento de las autodefensas; la segunda en agosto y la tercera en mayo de 2014. El 18 de junio de ese año dejó el cargo de manera definitiva.

El Congreso de Michoacán eligió como gobernador al académico Salvador Jara. Jesús Reyna, ex secretario de Gobierno del estado y gobernador interino durante las ausencias de Fausto Vallejo, fue detenido en abril de 2014 por presuntos nexos con la delincuencia organizada.

La caída del gobernador y del secretario de gobierno fue resultados de una pugna política entre los equipos del poder ejecutivo federal frente al hombre que se dice está detrás de la silla en el presente sexenio.

La salida “neutral” fue nombrar al rector de la Universidad Nicolaíta bajo el impulso del grupo de Miguel Ángel Osorio Chong.

Jorge Carrillo Olea dejó el cargo de gobernador de Morelos en mayo de 1998, tras un juicio de procedencia, e inhabilitado por 14 años para ocupar un puesto en el servicio público por su responsabilidad en actos de omisión  en los delitos de secuestro y homicidio.

Jorge Morales Barud asumió como gobernador interino y dos años después lo reemplazó Jorge Arturo García Rubí, designado por el Congreso estatal para ocupar el cargo del 18 de mayo al 30 de septiembre del 2000 para empatar las elecciones estatales con las federales.

Carrillo Olea era plenamente identificado con el equipo político de Fernando Gutiérrez Barrios, uno de los hombres con mayor información sobre el servicio secreto del país. Hábil como es Salinas, lo nombró secretario de Gobernación, con la idea de tenerlo cerca.

Sócrates Rizzo renunció a la gubernatura de Nuevo León el 18 de abril de 1996, luego de una crisis política generada por los escándalos de corrupción de funcionarios en su administración y por el crimen del reconocido abogado Leopoldo del Real Ibáñez. Fue reemplazado por Benjamín Clariond.

El nombramiento de Clariond era con la intención de fortalecer las relaciones políticas entre el gobierno federal y los empresarios del norte. Éstos han sido reacios a llegar a acuerdos con el poder político central y específicamente con priistas. El signo de ese distanciamiento lo observamos en el apoyo que le ofrecieron en 2012 a Andrés Manuel López Obrador.

Ramón Aguirre ganó la elección de 1991 de Guanajuato, pero el PAN alegó fraude y el priista decidió no tomar posesión del cargo. El Congreso del Estado designó gobernador provisional al entonces alcalde panista de León, Carlos Medina Plascencia.

Eran los primeros signos de las llamadas concertacesiones en donde el PAN se convertiría, en el corto plazo, en la primera fuerza electoral para conquistar la presidencia en el 2000.

Fausto Zapata ganó las elecciones estatales en 1991 en San Luis Potosí, pero cuatro días después renunció al cargo entre las presiones del candidato de la coalición formada por PAN, PDM y PRD, Salvador Nava, quien denunció fraude electoral. Fue sucedido por Gonzalo Martínez Corbalá.

El gran luchador social Salvador Nava representó en su momento lo que hoy se conoce como resistencia civil pacífica. Este movimiento es ilustrativo del futuro que hoy se observa en Guerrero con la movilización de miles de personas con su objetivo –ya cumplido- de derrocar a Ángel Aguirre Rivero. Luego de impedir la asunción de Fausto Zapata, todo quedó igual.

De los casos aquí anotados el mayor número de gobernadores –en desgracia política- corresponden al sexenio de Carlos Salinas de Gortari. revistaa@yahoo.com

jueves, 23 de octubre de 2014

Violencia o Movimiento pacifista activo

A partir de actos violentos en Guerrero con el incendio del Congreso, Palacio de Gobierno, las oficinas del PRD en Chilpancingo, el palacio municipal de Iguala se hace necesario revisar si en los tiempos actuales el uso de esos mecanismos refuerza o debilita un movimiento político.

Las siguientes consideraciones son de una exposición de Erica Chenoweth, doctora en Ciencias Políticas, quien luego de revisar por dos años todas los manifestaciones políticas desde 1900 hasta 1986, llega a la conclusión de que las protestas pacifistas activas han tenido mayor éxito que las violentas.

Su revisión (cientos de casos) tomó en cuenta toda aquella manifestación política con al menos mil personas.

Ella sostenía, por percepción, que el poder reside en las armas. Que una protesta pacífica frente un poder dictatorial, incompetente, desalmado, brutal y despiadado era una ingenuidad.

La doctora define que la no violencia o resistencia civil como una forma activa del conflicto se realiza con protestas, boicots, manifestaciones con el objetivo de buscar la cooperación de las masas para el cambio.

Antes de su estudio pensaba que el movimiento pacifista era con la finalidad de encontrar reformas en temas ambientalistas o de género; pero NO para derrocar a un dictador, por ejemplo.

Filipinas en 1986 el poder del pueblo derrocó a Ferdinand Marcos. Lo mismo en Serbia sobre Milosevic, el carnicero de los Balcanes, en octubre de 2000.

El resultado de su información le ofreció que el doble de casos de organizaciones NO violentas tuvo mayor probabilidad (dos a uno) de triunfo que las violentas.  En los últimos 50 años se han incrementado las protestas NO violentas frente a las violentas, son más comunes y exitosas.  Porque, insiste la investigadora, todo reside en el poder de la gente.

Otro dato que nos ofrece la doctora: Los gobiernos solían preocuparse si el 5% de sus gobernados se organizara; ellos podrían perder el mando. Ahora se sabe, de acuerdo a su estudio, que con el 3.5 de la población activa en protesta puede derribarlos.

Ese minúsculo porcentaje -3.5-, representa, por ejemplo, en Estados Unidos 11 millones de personas. 

En México la cantidad rondaría por los 4 millones de habitantes. Lo cual abre la posibilidad y esperanza de un cambio por la vía pacífica. Y ello se puede concretizar, por ejemplo, si partidos de oposición se unieran, con lo cual, a corto plazo (2015) podría cambiar de partido. Pero lo interesante es que la gente podría alcanzar a comprender la fuerza de su voto.

Es decir, ya no se trata sólo de cambiar al gobernante de un partido por otro, sino de saber que la gente ha cobrado conciencia.

En realidad, sostiene la investigadora, un movimiento activo pacífico lleva años para consolidarse.


La ventaja de la actividad no violencia es que es incluyente por género, raza, edad, partido político, clase y ambiente urbano o rural. La violenta por su mismo comportamiento requiere de un fuerte financiamiento y cierta formación militar.

 El suceso del 26 de septiembre en Iguala, Guerrero, con la desaparición de 43 estudiantes ha movilizado muchos lugares de México. Y podría convertirse en la semilla de un movimiento pacífico activo.

miércoles, 22 de octubre de 2014

Apoyos, retiros políticos; tercera opción Guerrero

Diferentes periódicos locales (Chilpancingo, Guerrero) coincidieron, el lunes 19 de octubre, en su información principal “gobierno federal controla 12 municipios”, la primera interpretación es que disminuye el poder del gobierno estatal y con esa incapacidad entra a operar el gobierno del centro.

La disminución de poder es consecuencia de los sucesos del 26 de septiembre donde murieron dos jóvenes, a uno lo desollaron y se encuentran desaparecidos 43 estudiantes normalistas de Aytzinapa.

La otra lectura ofrece un apoyo centralista para evitar minar aún más al gobierno estatal y que continúe en sus actividades, mientras pasa la crisis.

Siguiendo con la primera impresión incluso se puede traducir en una especie de comisionado embozado a través del Procurador General de la República, Jesús Murillo Karam. Tal y como ocurrió  en Michoacán porque cuando era gobernador Fausto Vallejo, el ejecutivo estatal, era un perfecto maniquí, bajo la sombra de Alfredo Castillo Cervantes.

La sesgada declaración del presidente referente a la renuncia del gobernador es un claro aliento para que culmine el periodo Ángel Aguirre Rivero.

Pero también se puede interpretar que al PRI le conviene que se quede a terminar su periodo el actual gobernador, para que, llegado el momento electoral se aproveche de lo que recientemente ha ocurrido con el asunto de los muertos y desaparecidos de Iguala; con este tema persuada al electorado del pésimo desempeño de los perredistas.

El otro escenario y donde los comentaristas han puesto poca atención es que ante la confrontación de dos grandes grupos -se puede leer, a simple vista, perredistas contra priistas- surge un tercero en discordia.

No se trata de un partido, sino como ha sucedido en los últimos eventos políticos, del personaje, el candidato.

Les recuerdo las dos últimas elecciones para gobernador en Guerrero para demostrar mi hipótesis. Zeferino Torreblanca Galindo no era perredista y ganó con el apoyo de ese partido. Lo mismo sucedió con Ángel Aguirre Rivero con su ascendencia priista. Es decir, no era el partido sino la persona.

Hasta el momento, luego de los acontecimientos del 26 en Iguala, a casi todos los actores políticos que desean la gubernatura les ha llegado “una rayita”negativa en su imagen. El que ha salido, repito hasta ahorita, casi inmaculado ha sido Luis Walton Aburto, el presidente municipal de Acapulco.

Además el gobierno federal ha reconocido su trabajo en la transparencia del manejo de recursos económicos.

Al parecer tiene el apoyo del gobierno federal y simpatía de priistas, perredistas y panistas. La interrogante es ¿logrará conservar ese apoyo? O le surgirán en este último tramo los enemigos.

Lo último, para documentar el apoyo. Se publica que el Sistema de Administración Tributaria reconoce "mejor manejo de finanzas en Guerrero", lo cual indica respaldo al gobernador por parte del gobierno federal. El comunicado dice que ocupa el séptimo lugar en este rubro.

Los senadores del PRI PAN y PRD imploraron la "salida" de Aguirre. La pregunta es: si fueron la representación de sus partidos porqué prorrogaron su resolución hasta el 30 de octubre o el 4 de noviembre?

Una posible respuesta es que esgrimen "su calidad moral política"; pero no su fuerza y jurídicamente carecen de elementos para desaparecer los poderes en Guerrero.

jueves, 16 de octubre de 2014

Quién será gobernador interino en Guerrero

La máxima en la política mexicana, dentro de un espacio autocrático, como históricamente lo ha sido este país, quien decide “el movimiento de una hoja” es el gran Tlatoani. Es decir, el poder ejecutivo federal. Y éste no ha dicho, todavía, la última palabra respecto a la caída del gobernador de Guerrero, Ángel Heladio Aguirre Rivero.

En ese sentido, el gobernador, continúa en su lugar y se rumora con menos capacidad financiera. Lo real es que desarrolla sus actividades y por eso no se puede constatar de inestabilidad. Que, al parecer, apunta hacia ese ambiente, pero eso es otro asunto.

Como muchos apuntan a que va a dimitir, entonces se antoja otra especulación de quién podría cubrir el interinato. Y aquí surgen algunos nombres.

El primero podría ser Florencio Salazar Adame, hombre que se ha forjado en la política, y, es profesional de este ejercicio. El siguiente es su currículum: presidente municipal de Chilpancingo, Presidente de la Comisión de Gobierno del Congreso Estatal, diputado federal, secretario de gobierno, secretario del gabinete federal y embajador. Su formación política estuvo basada en el priismo. Cambió de partido (PAN) cuando visualizó la alternancia.

Jesús Martínez Garnelo: magistrado, presidente del Tribunal Superior de Justicia y secretario de gobierno. Persona identificada con Ángel Aguirre Rivero.

Beatriz Mojica Morga, actual secretaria de Desarrollo Social y persona política de una expresión política del PRD conocida como Nueva Mayoría. Como se puede observar es la única mujer de este listado y esta condición podría favorecerle.

Sofío Ramírez Hernández, senador, ex secretario de gobierno estatal (Desarrollo Rural) y ex presidente municipal de Tlalixtaquilla -región de la Montaña-. Gente cercana al gobernador, Ángel Aguirre Rivero.

Héctor Astudillo Flores, ex candidato a gobernador por el PRI, ex senador, ex diputado federal, ex diputado local y ex presidente de la Comisión de Gobierno del Congreso local, ex presidente municipal de Chilpancingo, por dos ocasiones.

Evodio Velázquez, aspirante a la presidencia municipal de Acapulco y líder de Nueva Mayoría.

Javier Saldaña Almazán, rector de la Universidad Autónoma de Guerrero. Este actor político podría repetir lo que aconteció en Michoacán.

Beatriz Mojija, repito es mujer. Pero otras condiciones para ocupar, en este momento, la sustitución es que sea un personaje que logre la unidad de la mayoría de las fuerzas políticas o aún mejor el consenso. Es decir, sea aceotada la propuesta tanto del PRD como del PRI y se puede hasta el PAN. Bajo esta característica descienden políticos como Martínez Garnelo y Sofío Ramírez ya que se les identifica como parte del grupo en el gobierno y es quien desean retirar del mando.

El más hábil es Florencio; pero algunos priistas lo califican de desertor, adjetivo que podría ser el obstáculo, pero en política "hay olvidos" en aras de la tranquilidad.

Como es un espacio perredista difícilmente podrían poner a un priista; sin embargo, en política, como ya lo escribí, todo puede ser posible y entonces estaría Astudillo.

Una carta bajo la magna es Evodio Velázquez porque se ha manejado con bajo perfil. La dificultad es que en los últimos momentos se careo (políticamente) con el gobernador.


Ellos se ponen de acuerdo; mientras nosotros esperamos.

jueves, 9 de octubre de 2014

Aguirre Rivero ¿Quién quiere estar en sus zapatos?

En tiempos de crisis política, como la que se vive en Guerrero, nadie quisiera estar en el lugar de Ángel Aguirre Rivero. En cambio cuando ganó la gubernatura en febrero de 2011, casi todos eran sus amigos o por lo menos decían serlo y hubieran deseado estar en su lugar.

Cuando la política sufre tiempos complejos, se criban lealtades y se patentizan viejos rencores.
También es necesario recordar que la política es como la rueda de la fortuna. A veces se encuentra abajo y en ocasiones arriba.

Los que hacen labor profesional de la política lo saben, por eso cuidan su lenguaje y son tersos.
Quienes estudian la política recuerdan acontecimientos del pasado, porque, se sostiene los sucesos se repiten.

Entonces recordemos mayo de 2006. San Salvador Atenco, Estado de México, era gobernador del Estado de México, quien hoy conduce los destinos del país.

Hubo enfrentamiento entre policías y colonos. Sucumbió un joven de 14 años.

Aquello levantó ámpula, no sólo en la opinión pública nacional sino internacional. Nadie quería estar en los zapatos de EPN. Fue una situación política difícil.

Pasaron 6 años y muchos olvidaron el episodio y el actor político conquistó la presidencia. De ubicarse en el fondo llegó hasta arriba.

Con esto, desde luego, no se justifica ni la muerte de alguna persona o la desaparición de otra(s).
Sin embargo, la política es caprichosa, con muchos recovecos y sólo la paciencia, la lealtad y la persistencia, da frutos. Esto lo saben los políticos profesionales.


Como observador del comportamiento político les recuerdo el pasado, el cual se puede presentar como futuro. Para bien o para mal. Depende, desgraciadamente de quien sea el padrino.

martes, 7 de octubre de 2014

Mensaje presidencial hacia Aguirre Rivero

El contenido del mensaje del presidente Enrique Peña Nieto con sus palabras claves de coadyuvar e institucional dan un respaldo al gobernador de Guerrero.

Con esa postura muchos priistas enmudecerán; tanto actores locales como nacionales para pedir su licencia. Conservan una cultura sumisa.

Evidentemente habrá quienes se opongan, como los panistas, sin la fuerza necesaria.

Aguirre Rivero cuenta con el apoyo de Luis Walton, presidente municipal de Acapulco; Armando Ríos Piter, senador por el PRD y del PRD, por lo menos de los Chuchos, con lo cual lo blindan.

Walton con su partido Movimiento Ciudadano representa a tercera fuerza política en Guerrero.


Los Chuchos son la segunda fuerza política al interior del PRD guerrerense y primera a nivel nacional.

El presidente es el poder ejecutivo.