miércoles, 17 de abril de 2013

Quién gana ante conflicto magisterial


El conflicto magisterial guerrerense, con casi un mes y medio de duración, encerró en un grave problema de imagen al PRD en el poder legislativo local. Cientos, sino es que miles de los cetegistas perciben que son compañeros con ese partido. Pero los diputados entienden que representan los intereses de la sociedad -que van desde sus intereses de grupo hasta los del gobernador y los que se encuentran en el poder legislativo federal- y no sólo de un grupo. Están en un viacrucis.

En política las consecuencias de sentirse distanciados o como colegas, en un grupo que se ha mostrado cohesionado (impulsaron juntos, maestros y PRD, la candidatura a gobernador de Ángel Aguirre) se van a reflejar en el siguiente proceso electoral. Así lo entienden Abelina López y Germán Farías, diputados locales perredistas, por lo que se muestran cautos, reticentes y hasta solidarios con los maestros.

Los profesores han encontrado eco –independientemente si estamos o no de acuerdo con sus luchas y hasta con sus métodos- por lo que no se puede escribir que su lucha sea justa. No eso, no. Pero de que han persuadido a otros sectores, eso no se puede negar, pruebas de ello son las paradas que han realizado en centros comerciales, calles de Chilpancingo y cierre de autopista, y, en política indica que muestran cierto peso.

Para ubicar en su justa dimensión el movimiento político magisterial, es evidente que ha ganado simpatía entre otros sectores: algunos padres de familia, organizaciones indígenas y ciertas policías comunitarias. Sin embargo, respecto al sector padres de familia se encuentra dividido. Unos sí los apoyan y otros exigen el regreso a clases.

En este enredo de retrato (cetegistas vs PRD) quien no ha dado señales de vida política en el estado, es el PRI. Simplemente porque puede salir raspado. Y, como se dice en argot, a río revuelto, ganancia de pescadores.

Los maestros, en esta experiencia de movilización, han comenzado a politizarse. Tal vez no lo entiendan en su dimensión en este momento, pero, luego con paciencia y el paso del tiempo, analizarán, tanto su participación como los resultados.

Si les va bien a los maestros, como ellos esperan con la aprobación de ley que elaboraron conjuntamente, ofrecerán su voto al PRD en el siguiente evento electoral. Caso contrario, si ven afectadas sus expectativas podrían darle el sufragio a otro partido. Y ese otro, sólo por rencor, odio y, porqué no hasta sentirse humillados, podrían ofrecérselo al PRI. En este nivel de esperanza en la cacha de votos es que actúan los diputados priistas.

En estricto sentido político el PRI puede salir ganando si los perredistas no le aprueban lo que juntos, magisterio y diputados de este partido, han escrito como iniciativa de ley. Dejarán de ser compañeros. Esa minoría priista sin hacer nada –bueno sí, declaraciones nada comprometedoras- saldrían con algunos votos.

Si el PRD, porque son mayoría en el Congreso, les afecta en las esperanzas magisteriales, y los profesores no desean desestabilizarse en su ideología de izquierda, podrían orientar sus votos a favor de Movimiento Ciudadano. En este escenario de pérdida para el magisterio van a tener tres opciones en su voto: Morena, Movimiento Ciudadano y, aunque usted no lo crea, el PRI.

Insisto no se puede desechar el capital político del magisterio. O se quedan en el PRD, siempre y cuando se apruebe la iniciativa en el poder legislativo o, si es rechazada la nueva ley, transitan al PRI o, por conservar cierta honestidad ideológica, se vuelcan a Morena o hasta podría salir ganando Movimiento ciudadano. Todo depende de la votación en el poder legislativo. revistaa@yahoo.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario