Se va, por fin se va
Joaquín López Dóriga como titular del noticiero más visto en la televisión
mexicana.
La pregunta obligada
¿porqué se retira?
Para esta empresa,
televisa, perdió credibilidad por conflicto de intereses. Que no es lo mismo a
credibilidad periodística.
Lo que pocos le
reconocen o aceptarán en López Dóriga es su apertura democrática.
Expongo el siguiente
ejemplo: en los últimos años (la verdad no llevo el recuento) el último minuto
de este espacio estuvo a cargo de diferentes puntos de vista sobre un
acontecimiento en específico.
El breve sitio se
llama o será recordado como “en la opinión de” donde participaron periodistas y
analistas, los cuales muchos de ellos eran oposición inteligente al gobierno y
a televisa. López Dóriga abrió la televisión a diferentes puntos de vista, y
eso, es mínimo tolerancia y/o democrático.
Se va, como lo escribo
en el segundo párrafo por conflicto de intereses. La esposa de López Dóriga
quiso comprar uno o varios departamentos a una señora de apellido Arambuzabala.
El valor oscilaba en 20 millones de dólares, aproximadamente.
Escribo quiso porque
nunca realizo el depósito del dinero. Con la fuerza mediática de Joaquín
intentó chantajear a Arambuzabala (quien ocupa el cuarto lugar de los más ricos
en este país) diciéndole que carecía de los permisos para ejecutar la obra
donde estaba -según- comprando los departamentos.
El pleito legal lo
ganó Arambuzabala porque tenía todo en regla.
El tema nunca se tocó
en el noticiario, pero se conoció en diferentes medios impresos. Por esta
cuestión de conflicto de intereses se va López Dóriga. Se bronqueó con la clase
económica.
En los últimos
programas López Dóriga solía presumir que en sus redes sociales twitter,
facebook e instagram había “una gran familia”; insinuaba miles de seguidores.
Ya no lo va a comentar
en el noticiero de televisa y es probable que pierda algunos miles, porque ha
perdido una hora de televisión. Los 60 minutos más vistos.
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