El tema político del momento en Guerrero es sobre Tixtla porque será el único municipio de Guerrero donde se realizarán nuevamente elecciones.Se le califican de extraordinarias.
Las autoridades electorales (magistrados) determinaron que más del 20 por ciento de las casillas no se instalaron y eso fue el argumento más consistente para celebrar otras elecciones.
Otras autoridades electorales (consejeros) concluyeron que había ganado el PRI de Saúl Nava Astudillo. Fue así que le entregaron su constancia como triunfador.
Hasta donde tengo conocimiento es que se establecieron algunas reglas del juego en donde participarán los mismos candidatos del PRI y del PRD, éste último encabezado por Hossein Nabor Guillén.
Lo interesante sobre la petición de nulidad en Tixtla es que además del PRD lo hicieron Morena, PAN, Partido de los Pobres de Guerrero (PPG organismo local, quienes no alcanzaron el 3 por ciento para reconocerlo como partido estatal) y Nueva Alianza.
Entonces, y de acuerdo a lo anterior, es previsible que estos partidos vayan en alianza para vencer al PRI. El tricolor buscaría la asociación con el Verde.
La historia política de los dos candidatos más fuertes es la siguiente: Saúl Nava ha trabajado para ser presidente municipal de Tixtla desde hace aproximadamente 10 años. Se ha acercado a un sinnúmero de habitantes de esta localidad, tanto en lo urbano como en lo rural. La gente le reconoce su afabilidad y su ayuda intermitente dirigido a diversos grupos indígenas.
De Hossein Nabor se dice que su mejor desempeño ha sido en el sector educativo a través de obras, entrega de equipos de cómputo, crear condiciones de electrificación en varias comunidades indígenas y el apoyo en ampliaciones de drenaje y alcantarillado.
Ambos son conocidos en el territorio tixtleco.
Otra variable que hace interesante el evento político electoral de Tixtla es la presencia de grupos que se han declarado por boicotear el proceso. Sin embargo, como será el único suceso estatal es previsible que arriben más fuerzas policiacas para reforzar la tranquilidad el día de las elecciones.
Tixtla, tal vez no represente mucho valor por la cantidad de votos que obtenga un partido en particular. Pero por celebrarse nuevamente elecciones se transforma en un emblema.
¿Quién ganará? En este momento no se puede augurar un triunfo del PRI o del PRD, al parecer depende de quién logre el mayor número de alianzas. Y en este trance puede haber sorpresas.
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