Adolfo Calderón Nava, secretario general del Sindicato Único de Servidores Públicos del Estado de Guerrero (SUSPEG), sostiene que el bono sexenal, cuyo monto asciende a cinco mil pesos por empleado, debe cubrirse al término del actual gobierno.
Tanto el gobernador Rogelio Ortega Martínez, como el secretario de Gobierno, David Cienfuegos Salgado, coinciden en que no existe ningún documento que avale la petición.
Salgado Cienfuegos especificó que el bono ha sido un gesto de buena voluntad del gobierno en turno. Y que las condiciones presupuestales del actual gobierno no permiten un desembolso de alrededor de 160 millones de pesos.
Por su parte, el gobernador explicó que si lo empleados piden el bono sexenal “todavía faltarían dos años, porque a él le tocó culminar un cuatrienio”. (periódico Milenio 25-09-2015).
Desde una visión legal los trabajadores tendrían que probar que les han pagado ese bono al término de cada gobierno en turno, ya que su único argumento es “por usos y costumbres”. Y como dicen los abogados ese término da origen a jurisprudencia.
Sin embargo, por declaraciones del mismo gobernador el mismo viernes informó que la Junta Local de Conciliación y Arbitraje declaró ilegal el movimiento, por lo cual el “patrón” tiene dos soluciones.
a) Aplica lo que está contemplado en el Contrato Colectivo, sanción que va del descuento hasta la terminación laboral o b) reconvenir a los trabajadores a que se presentan a laborar y si en un término de dos días no retornan a sus labores empezaría a rescindir contratos o aplicar descuentos.
Una tercera vía sería la política: entregar un recurso, a lo mejor proporcional, que iría de uno a cuatro años. Así como se encuentra la situación sería del año que le tocó gobernar.
Cualquier salida le traerá consecuencias funestas en la imagen del gobierno de Rogelio Ortega, porque finalmente, como lo ha dicho reiteradamente, no pagará el bono. Y si lo hace sería un precio simbólico a costa de su recuerdo como figura gobernante frente a los trabajadores del gobierno del estado.
La ley está del lado del gobernante, en contraste la evocación en la memoria de 30 mil empleados sino cubre el bono.
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